13 febrero 2010

Bajemos el horario laboral a 21 horas semanales

¿21 horas a la semana? ¿de veras?

Esta es la idea que propone un estudio del "think tank" New Economics Foundation para corregir, no solamente el estado de la economía actual, sino tambien esa mala vida que dicen que llevamos, que nos produce niveles tan altos de estrés y nos impide prestar la debida atención tanto a nosotros mismos como  a nuestros más allegados, niños, adultos y mayores.

Una reducción del horario laboral  supondría un mejor equilibrio laboral y una mejor calidad de vida ya que eliminaría el exceso de trabajo de unos al mismo tiempo que  haría descender el desempleo.

Hay que tener en cuenta, indican desde este organismo, que trabajamos más horas actualmente que hace 30 años a pesar del drástico aumento del paro, dato que, en sí mismo, podría considerarse  una inconguencia.

Es cierto que se ganaría menos -puntualizan en el  informe- pero tambien es cierto que se dispondría de más tiempo para desarrollar tareas de importancia social y personal. Además tambien sería posible postponer la jubilación.

Según Anna Coote, co-autora del informe, "muchos de nosotros vivimos para trabajar, trabajamos para ganar, ganamos para consumir y nuestros hábitos de consumo estan destrozando los recursos naturales" y añade que "incluso podríamos ser mejores empleados, menos estresados y más felices y con mejor  control lo que redundaría en una mayor y mejor productividad".

Ha llegado el momento de romper con el poder que ejerce el reloj industrial, recuperar nuestras vidas y trabajar para conseguir un futuro sostenible.  Andrew Simms director de este organismo indica que  un cambio cultural de esta naturaleza implicaría retos muy importantes pero tambien beneficios enormes, tanto para la economía como para la calidad de vida y para el planeta mismo.

Suena bien, incluso muy bien,  pero resulta inevitable preguntarse ¿sería factible? ¿escuchará alguien esta sugerencia?

Recibir actualizaciones en mi bandeja de entrada
Subscribirse a Observando

18 comentarios:

María dijo...

Hola, tocaya:

¡Pero cuánto me alegra volver a leerte! gracias por seguir aquí, y también, por haberte pasado por allí.

La verdad es que es buena idea la que compartes, reducir el horario laboral a 21 horas semanales, y de esta forma, los que trabajan 40 horas semanales, verían disminuído su estrés y su calidad de vida, pero no sólo eso, sino que se crearían muchos puestos de trabajo, y los que, como yo, que estamos en paro, tendríamos oportunidad para trabajar, de nuevo, aunque no creo que muchos de los que trabajan, aceptaran esta propuesta, porque verían reducidos sus ingresos.

Pero la vida no consiste en ganar más y llevar una vida estresada, también, consiste en vivirla con conocimiento, y calidad.

Mira, esta propuesta tendríamos que hacérsela llegar a los políticos, ya que ellos, no hacen nada por cambiar su política para crear puestos de trabajo, sino que, al contrario, se están destruyendo cada día.

Un placer, tocaya, de tenerte cerca.

Un beso muy grande, y feliz fin de semana.

Adolfo Calatayu dijo...

Hola amiga querida: sí,seguro que le prestará atención los trabajadores,nadie más..
un beso grande,y siempre es un placer visitarte !!!

m.eugènia creus-piqué dijo...

Sería estupendo trabajar menos horas, lo que no iría bien es ganar la mitad del sueldo, cómo se pagaría la hipoteca ? Vaya, con los problemas que ya tiene ahora la gente con unos sueldos míseros de mileuristas imagínate que encima les pagan la mitad, creo que nadie lo aceptaría, lo de crear empleo tendríamos que verlo tambien, la reducción de jornada laboral en Francia ha sido un desastre que no ha creado para nada el empleo deseado,en fín , no se que decir, yo apostaría por trabajar 21 horas pero con el mismo sueldo, bueno esto quisieramos todos, verdad? Un beso fuerte.

Terox dijo...

Suena bien la propuesta... habría que ver cómo se llega a implementar y en los costos adicionales asociados (por ejemplo, ¿habría que mantener el equipamiento durante toda la semana? o ¿las estaciones de trabajo serían compartidas?). Eso sin contar con la rebaja en el salario... que si no, habría que tomar dos trabajos... jajajaja

Genín dijo...

A mi me parece una excelente idea, además con esta ultima crisis el consumir para producir está demostrado, que además de cargarnos el planeta, no funciona.
Para mi es un poco tarde, pero opinar, opino...jajaja
Besitos y salud

Marina Filgueira dijo...

Hola María: Pues me parece que la idea no es mala en si... pero no beneficiaría en nada, a unos padres con cinco hijos, unos pequeñines otros- en edad escolar, con la mitad del sueldo... ¡siete bocas a comer, vestir, calzar y materiales del colegio! No se lo veo yo muy halagüeño- su porvenir. Todos necesitamos una mejor calidad de vida, por supuesto que si. Pero veo muy difícil de arreglar lo desarreglado. Esperemos entonces haber que pasa. Un abrazo María, me alegra volver a verte en tu espacio de observaciones... muy interesante por cierto. Se feliz

María dijo...

Un besito, tocaya, en este día martes de carnaval.

Unknown dijo...

Buen día María.

No sé bien qué opinar acerca de lo que mencionas en tu entrada.

Supongo que estará bien la propuesta de reducción de horas de trabajo, y algún beneficio le traerá al ser humano en su condición de SER.

Algunas las menciona la Sra. Anna Coote. Aunque en tu cita me es inevitable detenerme en sus palabras finales. “…lo que redundaría en una mayor y mejor productividad”.

Aunque “suene” utópico mi comentario, también me es inevitable recordar lo que leí alguna vez en “MANUSCRITOS ECONOMICOS Y FILOSOFICOS DE 1844” lo que para Carlos Marx (en su condición de Filósofo) escribió acerca de la función del trabajo y lo que significaba (según él) para el hombre (en su sentido genérico), y que reflejan las siguiente citas:

De esto resulta que el hombre (el trabajador) sólo se siente libre en sus funciones animales, en el comer, beber, engendrar, y todo lo más en aquello que toca a la habitación y al atavío, y en cambio en sus funciones humanas se siente como animal. Lo animal se convierte en lo humano y lo humano en lo animal.
Comer, beber y engendrar, etc., son realmente también auténticas funciones humanas. Pero en la abstracción que las separa del ámbito restante de la actividad humana y las convierte en un único y último son animales.


El animal es inmediatamente uno con su actividad vital. No se distingue de ella. Es ella. El hombre hace de su actividad vital misma objeto de su voluntad y de su conciencia. Tiene actividad vital consciente. No es una determinación con la que el hombre se funda inmediatamente. La actividad vital consciente distingue inmediatamente al hombre de la actividad vital animal. Justamente, y sólo por ello, es él un ser genérico. O, dicho de otra forma, sólo es ser consciente, es decir, sólo es su propia vida objeto para él, porque es un ser genérico. Sólo por ello es su actividad libre. El trabajo enajenado invierte la relación, de manera que el hombre, precisamente por ser un ser consciente hace de su actividad vital, de su esencia, un simple medio para su existencia”.

Por último, al cliquear sobre tu link de la organización “think tank" New Economics Foundation y encontrar en Wikipedia los siguientes párrafos:

En Argentina uno de los think tanks que mayor protagonismo ha tenido en los últimos años es el Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) de la Fundación Mediterránea. Esta institución ha tenido un rol destacado en las reformas económicas instauradas en Argentina durante la década de los noventa y sus investigadores han ocupado distintos cargos del gobierno nacional (en el Banco Central, los Ministerios de Relaciones Exteriores, Defensa, Economía y Educación, entre otros), gobiernos provinciales así como también asesorando a otros países latinoamericanos y en distintas Organización Internacionales (ONU, ONUDI, CEPAL, FMI, BID, etc).

Y recordar lo que significó ese década en mi país, de cuya secuela nos va a costar 2 generaciones enteras recuperar el estrago que dejó en la red social, me da escozor!!!

Un beso.
Rik

Unknown dijo...

Disculpa si te resulto latoso María, pero es que me ha “quedado algo en el tintero” a propósito de esa frase de Anna Coote; y es cuando dice:

muchos de nosotros vivimos para trabajar, trabajamos para ganar, ganamos para consumir y nuestros hábitos de consumo están destrozando los recursos naturales.”

Desde mis 15 años de edad en que comencé con mis primeros “escarceos” laborales que casi siempre han sido en forma independiente, salvo 12 años que trabajé en la Salud Pública de la provincia donde vivo en Argentina, lapso en el que mi empleador fue el Estado Provincial y tenía un régimen laboral de 44 hs semanales; para luego retomar (desde 1994) mi actividad profesional en forma liberal; ni antes ni después me preocupó la cantidad de horas trabajadas.
Siempre trabajé con pasión en lo que hice hasta mis actuales 59 años…, tuve esa suerte!!!.

No trabajé para ganar dinero, sino que era razonable que por mi actividad laboral se me retribuyese de esa manera.
Claro que gran parte de esa retribución la utilizaba para consumir. Si no comemos y nos abrigamos posiblemente pereceremos de hambre o frío. Y de vez en cuando, si no nos diésemos pequeños confortes como adquirir una propiedad para albergarnos o un auto para viajar o trasladarnos, estaríamos “fregados” y bastante insípida sería la vida.

Posiblemente la Sra. tenga razón, específicamente respecto de mi persona, porque desde joven adquirí el hábito del consumo de tabaco y creo haber contribuido en estos años en la contaminación del hábitat.
Más, salvo por esa “tara” mía, en nada me siento responsable respecto de la destrucción de los recursos naturales.

Sin embargo, las mega empresas que se instalan a lo largo y ancho del planeta, y que general miles de puestos de trabajo para esos empleados que luego saldrán a consumir con lo que ganan, tengo la impresión que sí son las reales responsables de esa destrucción.

Tal es el caso de lo que sucede en Argentina con la instalación de una de esas empresas en el vecino país de Uruguay y por cuya explotación productiva en la actualidad se generó un litigio entre ambos países que en la actualidad se esta resolviendo en el supremo Tribunal de la Haya.

Si te quieres enterar de qué se trata, te dejo el siguiente link para que te informes.

Conflicto entre Argentina y Uruguay por plantas de celulosa

Ahora sí!.

Otro beso.
Rik

ipecan dijo...

Yo estoy a favor de la propuesta. Sin duda alguna un empleado puede ser mucho más productivo sin trabajar las 40 horas semanales.
Y lo más importante para mi es vivir con calidad, dedicando tiempo a lo realmente importante. El ser humano no necesita tanto para llevar una vida placentera.

Un saludo.

toupeiro dijo...

A los empresarios solo les interesa el poder y el dinero; a muchos trabajadores aparentar y vivir muy por encima de sus posibilidades.


La cantidad de trabajo existente es como un pastel que está muy mal repartido, unos se atiborran y otros pasan hambre; hay algo de vicio en ello.

Soy algo pesimista en este tema con tanta globalización no veo claro el futuro laboral.

Maria dijo...

ALEX gracias por tu visita. No solo los empresarios se preocupan unicamente por lo suyo... desgraciadamente.

MARIA, gracias por pasarte. Me encanta disponer de tiempo para visitarte e intercambiar comentarios. Sería bonito que todo estuviera mejor repartido pero me temo que el llamado estado del bienestar tiene aun mucho trabajo por hacer y mucho por desarrollar. Aunque esta propuesta parece poco realista.

ADOLFO, amigo, los trabajadores le prestaran atención, como dices ¿y luego? ¿sonreirán irónicamente o albergaran alguna esperanza? Gracias por comentar.

MARIA EUGENIA creo que tu opinion coincide con la mayoría. Gracias por tu visita.

Justamente TEROX creo que al final tomarian dos trabajos, como ya hacían en tiempos pasados y si no pudieran tendrían aún mayores problemas porque esta propuesta es como la de la pescadilla que se muerde la cola ¿no? Parece inevitable que se tuviera que trabajar a turnos, como dices.

GENIN, gracias por venir a comentar. Las ideas buenas son las que se pueden implementar y esta, a priori, no parece que tenga esa virtud.

MARINA, yo tambien observo que es difícil arreglar lo desarreglado.

RICARDO gracias por pasarte por aqui, ya sabes que tus comentarios siempre me resultan, lo que son, especiales. "El hombre, precisamente por ser un ser consciente hace de su actividad vital, de su esencia, un simple medio para su existencia”. Trabajar solamente 21 horas podría ser interpretado de muchas formas, una de ellas podría ser la privación de libertad, por ejemplo.
No sé bien quien se equivoca, respecto a los "tanques de pensamiento", si quienes piensan o quienes ponen en práctica el pensamiento aplicando sus teorías, como bien demuestra tu ejemplo.
Tu comentario abarca mucho. Lo de tus cigarrilos es "pecatta minuta". ¿No será más bien la revolución industrial la responsable. Sin los desechos de la industria ¿tendría alguna magnitud el cigarrillo en el medio ambiente? me pregunto.

IPECAN, bienvenido y gracias por tu comentario. Si, sería estupendo reducir el horario laboral pero faltaría que no explicaran, como dicen los demás comentaristas, como adaptamos el modelo de vida actual con el que se propone. ¿Quien pagaría las facturas? No parece que el "tanque de pensamiento" lo haya resuelto.

Hola TOUPEIRO, gracias por venir por aqui. Yo tampoco lo tengo claro, aunque si creo que con el tiempo habrá que reducir el horario laboral otro poco, como ya se ha hecho en diversas ocasiones. (mis abuelos alucinarian si nos vieran trabajar "solamente" cinco días semanales).

Y para finalizar: En el artículo original, al final preguntan ¿no te gustaría trabajar 4 días semanales? Eso reduciría la jornada a 32 horas (no 21). Debo estar haciendome mayor porque no lo entendí y por eso lo dejé fuera.
PS// Los acentos que faltan los pondré otro día, je je je.

Anónimo dijo...

coincido con algunos observadores en la dificultad de aplicar una idea en este mundo afortunadamente plural.
creo también que valor del trabajo está en revisión: ¿realización personal o medio de subsistencia?. lo ideal, una equilibrada combinación.
¿se han fijado en el placer con que trabajan y se afanan los peques cuando se lo permitimos?
mal asunto cuando sólo le damos valor al trabajo asalariado.

en fin, maría, gracias por permanecer. besos, ate.

Maria dijo...

Ate me alegró mucho verte por aqui y te agradezco la visita. Por otra parte estoy bastante de acuerdo contigo en tus apreciaciones, y en lo relativo a trabajar solo por un salario me suena un poquito a esclavitud en cierto modo. Un beso y hasta pronto, espero.

francesc dijo...

Mmmmm...lo veo difícil, tendríamos que renunciar al salario actual y de cantidad de tonterías que nos compramos para compensarnos. Hasta aquí, quizás fuera posible...pero ¿quien convence a las grandes multinacionales, gobiernos y usureros que convierten el derecho a tener una vivienda en un negocio?
un beso

Maria dijo...

Franki estoy de acuerdo contigo... es una idea interesante pero muy difícil de llevar a la práctica.

P loM eiraM dijo...

Buenas tardes, es díficil leer y darle la apreciación debida a todos los commentarios pero notó en algunos que estamos pensando y de hacho estoy de acuerdo, que a los grandes de las empresas solo les interesa el dienro y que los trabajadores muchas veces son para ellos una cifra y un gasto más. Pero esta maravillosa propuesta de las 21 horas no debe reciclarse asi nada más, sería muy interessante dentro de una sociedad que le teme al cambio, emprender un sólido reto como éste.

Tengo mucho tiempo que no escribo en mi blog, precisamente porque el tiempo me ha hecho jugadas sucias los últimos días pero espero tocar también el tema, para aportar mi diminuto grano de arena, después de haberme enterado en discovery, leer en BBC news, y por supuesto la iniciativa de otro blogger.

cualquier comentario por favor: plomeiram.blogspot.com

Anónimo dijo...

Estamos de acuerdo.
Hoy día no hay tiempo para el contacto familiar ni social. LLegamos al final del día cansados y acosamos a los demás con nuestro mal carácter a causa del estrés abusivo de sólo trabajar.
Da la sensación de que se tiene que trabajar hasta la enfermedad y la muerte, sin poder gozar de la vida y así no pagar pensiones.
Un mínimo de horas sería lo ideal, aúnque ¿quien se adaptaría a cobrar menos?. Para ello el precio del consumo tendría que rebajarse también y en ese momento eso se ve muy mal...
Por otra parte la mayoría der la gente está acostumbrada a tener y tener, sin saber lo que es el sacrifício.
Ojalá llegue eso que dices, pero es necesario un cambio radical de paradigma, y todavía no hay demasiada conciéncia global. Una cosa es loe se dice y la otra las obras.



Gracias.