Otra leyenda urbana ¿Conoces alguna más?

CINCO DIAS MUERTO Y NADIE SE PERCATA

George Turklebaum, de 51 años de edad, que trabajaba como revisor en una empresa de Nueva York desde hacía 30 años, sufrió un paro cardíaco en la oficina que compartía con otros 23 trabajadores y nadie se dió cuenta. Esa es la base de la historia que circula por Internet desde el año 2001.

Es evidente que se trata de una leyenda urbana. Es imposible que un cuerpo, después de varios días, no presente los síntomas habituales de la muerte, hinchazón, decoloración, escape de fluidos y el "olor a muerto" característico de estas situaciones.

Pero esta vez la leyenda es algo más que pintoresca, no tanto por sus características, sino porque no es frecuente que los medios serios caigan en ellas. Sin embargo la noticia ha aparecido en muchos de ellos, desde el Times a la BBC y pasando por todos los demás, desde los que ha ido dando la vuelta al mundo hasta llegar a Nueva York donde ocurrieron, supuestamene, los hechos. Y allí es donde surgió por primera vez la incredulidad. Eso es lo que sorprende, que nadie haya hecho sus deberes y haya aparecido publicada sin haber sido verificada. Así se ha convertido George Tuklebaum en el muerto más famoso del mundo.

Con un poco de investigación enseguida apararecieron los "indicadores" típicos de las leyendas urbanas. Por ejemplo que no existe ningún George Tuklebaum en Nueva York. Tampoco se menciona la empresa donde ocurrió, porque entonces habría sido fácilmente comprobable y se habría podido entrevistar a sus empleados. Con dos o tres minutos más de búsqueda aparece el periódico en el que se publicó la historia por primera vez, el Weekly World News, y resulta que es de esos que se dedican a lanzar "exclusivas" de fenómenos extraordinarios y noticias increíbles como la el embarazo de una mujer por un extraterrestre.

Otro dato llamativo es que la noticia lleva circulando desde diciembre de 2000. Este suele ser un punto que todas las leyendas urbanas tienen en común, llevan años circulando y sorprendiendo como si fueran nuevas.

Hemos vuelto a ser víctimas de nuestro propio morbo , que tanto dinero dá a quienes se dedican a explotarlo, pero tambien es cierto que la historia tiene ecos del egoismo e incluso del egocentrismo de una sociedad exageradamente individualista que lleva a la falta de interés de unas personas por otras, hasta el punto de que nadie se dé cuenta de que un compañero ha muerto en el despacho de al lado. Hay casos comprobados como el que publicó el periódico finlandés Ilta-Sanomat reproducido por la BBC (ver News - Finns miss death in tax office).